domingo, 3 de noviembre de 2013

El cazador más elegante y ecológico

PILAR HERNÁNDEZ / TOLEDO

No es un deporte, es un arte; es la cetrería, la actividad cinegética más elegante y a la vez más ecologista. Pasamos un día de caza con los cetreros en un coto de Toledo, una de las provincias con mayor tradición en este espectacular duelo entre depredador y presa.

LUNA REVENGA

«Oliva», «Coco» y «Eclipse» están inquietas porque saben que hoy les toca salir al campo a hacer lo que más les gusta. Visten con sus mejores galas y están en plena forma, eso sí con hambre, imprescindible para hacer bien su trabajo. En este día nublado y lluvioso les acompañan sus dueños y a la vez compañeros, Luis, Fernando y Alfonso. Las águilas Harris están preparadas para cazar.


La cetrería es la primera caza con animal que se conoce y, sin duda, la más espectacular y bella. Y Castilla-La Mancha es un paraíso para su práctica. Una modalidad que estuvo a punto de desaparecer en España a mediados del siglo pasado pero que ha conseguido recuperarse en los últimos años, gracias en buena parte a su consideración de Bien Protegido por parte de la Unesco y al impulso dado en los años 70 por Félix Rodríguez de la Fuente, el «héroe» de todo cetrero.
Cuenta la leyenda que hubo un rey en Asia que obligó a sus dos hijos a irse de la tribu, sin armas ni alimentos, para demostrar que si sobrevivían durante un año en esas condiciones serían dignos herederos de su trono. A punto de morir de hambre los dos hermanos, observaron cómo un azor capturaba una pieza. Uno de los hermanos propuso cazar al azor y comérselo, el otro propuso capturar al ave y enseñarle a cazar para ellos. Consiguió educar al azor y al año siguiente volvieron los dos hermanos a la tribu bien alimentados, bien cuidados y con un azor en el puño... de Gengis Kan.
Los protagonistas de esta historia no son azores, son águilas Harris,que han revolucionado la cetrería de bajo vuelo en España en los últimos años, por su fácil manejo y la posibilidad de cazar conejos y liebres en grupo. La otra modalidad es la altanería, en la que se utilizan halcones peregrinos o sacres, y que es más elitista y costosa. La presa es la perdiz.
«Urko», el azor de Luis Sánchez, un conocido y respetado cetrero toledano, hoy no sale a cazar, pero sigue siendo el rey de este arte, por su agrevisividad, por su belleza y por la dificultad que entraña su manejo. «No eres cetrero hasta que no has hecho un azor», nos aseguran.
Pero las Harris son más listas y más solidarias. Los cetreros enseñan a sus pájaros a «respetar», es decir, el primero que coge la pieza se queda con ella. El azor eso no lo permite. Hay un dicho en este oficio que dice que «no hay pájaro malo, sino cetrero malo» y es que la enseñanza es fundamental para hacer una buena práctica de este arte.
Y los protagonistas de esta jornada de caza demuestran que tienen bien enseñados a sus pájaros. Fuertes y lustrosos se lanzan contra los conejos que salen a su paso con elegancia y a la vez con contundencia. Es un espectáculo ver su vuelo y asombroso cómo se posan dócilmente en el puño del cetrero...[Pincha aquí para ver las imágenes]
La declaración de Bien de Interés Cultural, con categoría de Bien Inmaterial, en Castilla-La Mancha, que entrará en vigor a partir del 16 de noviembre, es un reconocimiento a este arte tan respetuoso con el medio ambiente.

¿Cuánto cuesta ser cetrero?